¿Por qué es importante la autoaceptación? ¿Cómo puedes aceptarte a ti mismo, con defectos y todo?
Puede resultar difícil salir de tu zona de confort si te sientes inseguro sobre quién eres. Phil Stutz y Barry Michels explican que para superar las debilitantes dudas sobre ti mismo, tienes que aceptar todos tus atributos negativos y transformarlos en fortalezas.
A continuación, te explicamos por qué aceptar lo que menos te gusta de ti mismo te ayuda a superar la ansiedad social.
Por qué debes aceptarte a ti mismo
Si te muestras vulnerable contigo mismo y con los demás acerca de tus puntos fuertes y débiles, dejarás de malgastar energía ocultando inseguridades y la redirigirás hacia un mejor rendimiento en tu vida diaria. Esa es la esencia de la importancia de la autoaceptación. Por ejemplo, si te sientes inseguro porque te cuesta realizar tareas técnicas en el trabajo, pero tienes talento para entablar relaciones positivas con compañeros y clientes, podrías tener una conversación sincera con tu jefe sobre tus habilidades. Como resultado, podrían cambiarte a un puesto más centrado en la comunicación. Esto te permitirá concentrar tu energía en lo que mejor sabes hacer, en lugar de preocuparte por la ineficacia de tu trabajo en otro lugar.
(Nota breve: En Liderazgo LeadershipTom Rath y Barry Conchie sostienen que los líderes deben ser sinceros sobre sus puntos fuertes y débiles. Cuando uno es sincero consigo mismo sobre sus capacidades, puede dedicar más tiempo y energía a lo que hace bien y crear un equipo de apoyo a su alrededor para suplir sus debilidades. Cuando tú y todos los miembros de tu equipo desempeñéis funciones para las que sois adecuados, todos os sentiréis más seguros de vosotros mismos. Los estudios que citan Rath y Conchie sugieren que cuando uno se siente seguro en su trabajo, está más sano, es más feliz y más productivo).
Aceptarte a ti mismo te ayuda a sentirte seguro para expresar tus verdaderos pensamientos y sentimientos, lo que mejora todas tus relaciones. Cuando estás en contacto con tus pensamientos y sentimientos más profundos, eres capaz de expresarte a la gente con más honestidad y claridad. Esto te ayudará a hacer que los demás se sientan más apreciados y les permitirá ser más abiertamente expresivos contigo, lo que dará lugar a conexiones más fuertes.
(Nota breve: compartir tus sentimientos sinceros no sólo mejorará tus relaciones actuales, también puede ayudarte a atraer a una comunidad de personas afines que te apoyen. En El lado bueno del estrésKelly McGonigal dice que puedes atraer relaciones significativas siendo honesto y abierto sobre las cosas con las que luchas personalmente. Por ejemplo, si luchas contra la ansiedad, crea un grupo en las redes sociales que hable de ella. De este modo, las personas con ideas afines se sentirán escuchadas y reconfortadas, lo que, en última instancia, atraerá a las personas adecuadas hacia ti).
Cómo aceptarse a uno mismo
Cuando sientas ansiedad por el rendimiento, imagina que una encarnación de tus atributos negativos está a tu lado. (Los autores llaman a esto tu sombra, pero nosotros nos referiremos a ella como tu "lado oscuro"). Sea cual sea la manifestación que elijas, asegúrate de que sea personal. Lo importante es que sientas su presencia. Por ejemplo, si sufres el síndrome del impostor en un trabajo nuevo, puedes imaginarte tu inseguridad como un perro nervioso.
Concéntrate en esta encarnación de tus atributos negativos e imagínala trabajando contigo como aliada. Los autores afirman que, de este modo, aprovecharás el poder universal de la verdad personal. Encarnar tu verdad personal significa reconocer tus verdaderos pensamientos y sentimientos -positivos y negativos- y luego permitirte expresarlos plenamente. Una vez que te hayas asociado con tu lado oscuro, dirige tu atención al público con el que te preocupa relacionarte y reclama internamente su atención. Los autores explican que hacer esto te llenará de confianza y te ayudará a comunicarte con más claridad. Por ejemplo, supongamos que el síndrome del impostor en un nuevo trabajo te ha impedido sentirte lo bastante seguro como para decir lo que piensas en las reuniones de la empresa. En ese caso, podrías imaginarte cogiendo al perro nervioso que representa tu inseguridad y consolándolo. A continuación, imagínate a ti mismo y al perro juntos llamando la atención de tu audiencia.